Mitos y Leyendas de Rapa Nui
Mitos y Leyendas chilenas
Tangata Manu
El tangata manu ('hombre-pájaro') era el ganador de una competición tradicional en Rapa Nui (Isla de Pascua). El ritual era una competición anual para obtener el primer huevo de la estación de charrán sombrío (manu tara) en el islote de Motu Nui (Gran isla), nadar de regreso a Rapa Nui y trepar el acantilado marino de Rano Kau hasta su cima cercana al poblado de Orongo. Esta ceremonia de primavera honraba al dios creador Make-Make: comenzaba con ocasión del hallazgo del primer huevo y culminaba con la triunfal investidura del tangata manu, el sagrado 'hombre-pájaro' de la isla de Pascua.
Cada año, los representantes de las diferentes tribus rapanui subían al volcán Rano Kau para celebrar en el centro ceremonial de Orongo, la nueva competición para la elección del tangata manu, quien ejercía durante un año la jefatura militar y política de la isla.
Make-Make, también conocido como Makemake
Es una deidad polinésica presente en la mitología pascuense.
Leyenda
La leyenda dice que luego de que Make-Make hubiese creado la Tierra sentía que algo le faltaba. Pero sucedió que un día tomó una calabaza que contenía agua, y con asombro se dio cuenta que al mirar en el agua, se veía su rostro reflejado en ella. Make-Make saludó a su propia imagen mientras observaba que en ella se apreciaba un pico, alas y plumas. Así fue como mientras observaba su reflejo, en ese mismo momento un pájaro se posó sobre su hombro. Observando la gran similitud entre su imagen y el pájaro, procedió a tomar su reflejo y lo unió con el del pájaro, naciendo así su primogénito. Pero a pesar de ello, Make-Make igualmente pensó en crear a un ser que tuviese su imagen, el cual hablara y pensara como él lo deseaba. Primeramente fecundó las aguas del mar, y producto de ello en las aguas aparecieron los peces. Pero como el resultado de ello no fue lo esperado, posteriormente procedió a fecundar una piedra en la que había tierra colorada, y de ella surgió el hombre. Make-Make estaba muy contento al haber creado al hombre, como la criatura que el deseaba; y como observó que este se veía muy solitario, posteriormente crearía también a la mujer. Mucho tiempo después, Make-Make se le aparecería en sueños a Hau-Maka, y le indicaría y explicaría como llegar a una isla inhabitada (La Isla de Pascua), para que en ese lugar tengan su nuevo hogar el Rey Hotu Matu'a y su pueblo. Posteriormente, Make Make junto a Haua, llevarían las aves hasta los motu (islotes) frente a Rano Kau; para que así se le celebre culto mediante la ceremonia anual de Tangata Manu (el hombre-pájaro).
En la [mitología de Rapa Nui] Make-Make era considerado como el creador del mundo. Al ser una isla muy apartada, con el paso del tiempo, las peticiones de los Rapa Nui hacia los dioses, estaban muy ligadas a la adquisición de alimentos. Debido a ello Make Make, la legendaria deidad de un origen más guerrero (matato'a) desplazaría al casi olvidado Haua, así como también a Tangaroa, la mayor divinidad polinésica. Por ello Make-Make está igualmente relacionado con la fertilidad. Posteriormente los conflictos internos, en el cual fueron destruidos la gran mayoría de los moai, hizo que surgiera como respuesta un diferente culto a Make-Make; ahora presente en la ceremonia del Tangata Manu (hombre-pájaro), en la que los distintos linajes competían anualmente por el poder político en la isla de Rapa Nui.
Orejas largas y orejas cortas
Otro mito Rapa Nui cuenta que posterior a la llegada de los polinesios, arribó a la isla otra inmigración de origen polémico ya que las características raciales de estos nuevos pobladores eran diferentes a las de los considerados nativos. Los recién llegados eran más corpulentos y robustos y se les conocía como los rasgos Hanau E'epe o "raza ancha", en contraste con los Hanau Momoko o "raza delgada.
Mitos y Leyendas de Isla de Pascua
Algunas versiones señalan que los Hanau E'epe tenían muy desarrollados los lóbulos de las orejas y por ello los relacionan con los incas, a diferencia de los Hanau Momoko que no presentaban esta característica, por su procedencia polinesia.
No obstante otros investigadores señalan que la diferencia entre los dos grupos se basaba fundamentalmente en la contextura física y que por esto, los Hanau E'epe constituían la clase trabajadora mientras que los Hanau Momoco, más delgados, eran la tribu o clase dominante. Para ellos el estiramiento del lóbulo auricular (tan característico de los moai) no era otra cosa que una práctica común en muchas culturas del mundo y lo que ocurrió fue que en algún momento de la historia, la palabra E'epe se mezcló con la palabra Rapanui 'Epe, que significa lóbulo auricular, dando origen a la leyenda de los "orejas largas" y los "orejas cortas".
Moai Kava-Kava
AKU - AKU
Cuenta la leyenda que cierto día, el ariki Tu'u Koihu, hijo mayor de Hotu Matu'a, estaba caminando a la media noche por Puna Pau cuando se encontró con dos espíritus, o aku aku, dormidos frente a él. Al verlos con atención se percató de que sus cuerpos eran esqueléticos, y decidió marcharse y dejarlos. Sin embargo al intentar escapar corriendo los despertó, así que los aku aku lo siguieron por temor a que dijera a alguien lo que había visto. mitos y leyendas de Isla de Pascua
Tu'u Koihu negó haber visto algo pero los espíritus no le creyeron y se quedaron vigilándolo por dos días y dos noches. Al ver que no decía nada, se marcharon. Una vez libre de los espíritus, el ariki regresó a Tore Ta'hana, entró en una choza, y en un trozo de madera de toromiro talló a las dos figuras descarnadas de los aku aku que había visto y que guardaba en su memoria. Este fue el medio de comunicación que encontró el ariki para contar lo que había visto. mitos y leyendas de Isla de Pascua
Este fue, según la tradición, el origen de los Moais Kava Kava ("estatuas con costillas") que los isleños acostumbraban tallar y colgar en la puerta de sus casas, del lado de adentro, para espantar a los malos espíritus.
Aku-Aku
Los Aku-Aku son "Espíritus guardianes" para los actuales habitantes de la Isla de Pascua, en el extremo este de Polinesia, en el sureste del Pacífico. Forman parte de la mitología Rapa Nui
Significado
Los Aku-Aku son espíritus benévolos o malignos de clanes o familias según el lugar determinado de cada espíritu. Estos espíritus son manifestaciones espirituales de habitantes que violaron las normas sagradas (tapu en idioma rapanui) declaradas por el ariki. Se relata que, cuando un habitante rompe un " tapu", el alma de la persona al morir cobra la forma de un Aku-Aku. También se relata que estos espíritus protegen lugares de la isla, reaccionando de forma agresiva ante los intrusos y que deambulan entre el mundo físico y espiritual. Los Aku-Aku son representados en figuras antromorfas de madera de toromiro (arbusto nativo extinto en su estado natural) llamados "Moai Kava-kava" por los isleños. Según las leyendas, en Hiva (la tierra natal de donde proviene el pueblo Rapa Nui) hay un lugar de residencia solo para espíritus, llamado "Ovake-vake". También relatan que para llegar de Rapa Nui a Hiva o viceversa, los Aku-Aku se "montan" en el arco iris.
Hotu Matu'a
Fue el primer ariki (rey) de Rapa Nui, hacia el siglo IV de nuestra era.
Leyenda
La mitología pascuense cuenta que antiguos sabios (maori) habían pronosticado que se hundiría la tierra de Hiva, mítico continente o isla. La posterior subida de las aguas causó muchas muertes, y en las generaciones siguientes se construyeron canoas para escapar de la isla y encontrar nuevas tierras. Fue en este contexto que se dice, que sucedió que el dios Make-Make se le apareció en un sueño al sabio Hau-Maka; para que el ariki Hotu Matu'a supiera que era su destino viajar hacia la Isla de Pascua; es decir, a Mata ki te Rangi (Ojos que miran al Cielo). Primeramente el ariki habría enviado siete exploradores a la nueva tierra, para reconocer lo visto por Hau-maka. Estos exploradores habrían sido dos hijos de Hau-maka: Ira y Raparenga; y cinco hijos de Huatava (hermano de Hau-maka) : Ku'u Ku'u, Ringi Ringi, Nonoma, U'ure y Mako'i la isla es llamada "Te pito o te kainga" (Ombligo o punto extremo de la matriz). Posteriormente, luego de la exploración, Hotu-Matu´a junto a su familia y su séquito llegaron a la isla en dos grandes pahi (canoa doble). Sin embargo Ira y Raparenga, quienes se habían quedado esperando al rey, al verle que se aproximaba le gritaron que aquella tierra no era buena ya que en ella crecía mucha maleza; a lo que el rey les contesta que eso no importaba ya que en su tierra también crecía maleza, refiriéndose a las inundaciones que lo arrasaban todo. Fue así como desembarcó el Ariki Hotu Matu'a, el primer rey de la isla, junto a su mujer Vakai a Heva y a su hermana Ava Rei Pu'a en la playa Anakena, donde fijaría su real residencia. Posteriormente, con todos los ritos y bendiciones correspondientes, dividió la tierra entre él y su hermana. Además habría asignado la mesetas del Poike a los prisioneros Hanau Momoko (orejas cortas); quienes en la tierra de Hiva habrían sido derrotados y también traídos a la isla. Desde entonces la isla recibió el nombre de Te pito o te henua (El ombligo de la Tierra). Antes de morir, Hotu Matu'a habría dividido la isla entregándole una parte a cada uno de sus hijos para que estos formaran sus propias tribus o mata.
Akahanga
A su muerte el Ariki Hotu Matu'a fue enterrado en el lugar denominado Akahanga (donde actualmente se encuentra el ahu Akahanga). Observaciones realizadas en terreno han permitido sugerir el empleo de conocimientos astronómicos para la localización de Akahanga y algunos otros sitios. La localización del sitio seleccionado para el emplazamiento de la tumba del Ariki Henua en el centro de la línea costera podría justificarse, porque de esta forma el mana o poder que de él emanaba, se repartía equitativamente para ambos lados de la isla, dando buenas cosechas y buena pesca para todos.
Hau-Maka
Hau-Maka también llamado Haumaka; sabio, profeta y consejero real que, en la historia oral o mitología pascuense, tras una visión mística o desdoblamiento, le habría indicado al ariki (rey) Hotu Matu'a la existencia de Isla de Pascua, señalándola como destino al que llevar a su pueblo frente al inminente hundimiento de la tierra natal de los rapanui, en la mítica Hiva. Si el relato tiene cierta base histórica concreta, como creen algunos autores,1 Hau-Maka o quienes inspiraron su figura habrían vivido en la época del poblamiento de Pascua, hacia el siglo IV.
Mito
La leyenda cuenta que al sabio Hau-Maka se le apareció el dios Make-Make en un sueño, en el cual llevó al espíritu de Hau-Maka a un viaje desde Hiva hacia una desolada Isla, que sería la Isla de Pascua.
En este viaje el espíritu de Hau-Maka se desplazó hacia el este pasando por una serie de islas, hasta alcanzar una octava tierra. El espíritu de Haumaka recorre la Isla identificando un total de 28 sitios con sus nombres. Así, en esta isla encontraría tres islotes frente al Rano Kau (Motu Kao kao - Motu Nui - Motu Iti), y los identificaría como "Ko ngā Kope Tutu'u Vai a te Ta'anga" (son los muchachos con los pies en el agua de Ta'anga).
Luego al subir a la caldera del volcán Rano Kau, lo denominaría "Te Poko Uri a Haumaka o Hiva". El cráter pequeño lo llama "Te Manavai". Luego se dirige a la costa sur buscando una residencia para el Ariki, reconociendo distintos lugares hasta que llega a Rangi Mea Mea (Cielo Rojo), refiriéndose al atardecer en Ovahe.
Posteriormente avanzaría al cerro Hau Epa que nombraría como "Maunga Hau Epa", y observaría las arenas blancas de una playa en un lugar que llamaría "Oromanga a Haumaka o Hiva"; considerándolo un sitio apropiado para la residencia del Ariki, y a la bahía inmediata la llama "Hanga Mori A One" (Anakena). Así, tras reconocer otros tantos sitios, nombra a la isla "Te Pito o te Kainga a Haumaka o Hiva".
Así, luego de recorrer la isla, el espíritu de Hau-Maka regresó a su cuerpo que había dejado a Hiva. Posteriormente relataría su visión a su hermano Huatava, y como miembro del linaje real (Ariki Paka), se dirige al Ariki Hotu Matu'a, para contarle su sueño.
Este hecho haría que el Ariki Hotu Matu'a enviara una embarcación con siete expedicionarios, (los dos hijos de Haumaka: Ira y Raparenga; y los cinco hijos de Huatava: Ku'u Ku'u, Ringi Ringi, Nonoma, U'ure y Mako'i); expedición que produciría la posterior llegada del Ariki Hotu Matu'a a la Isla de Pascua; y con ello el poblamiento de esta isla.
Hiva
Hiva es el nombre de una mítica tierra o isla, de la cual habrían provenido los ancestros de los nativos de la isla de Pascua (llamada Rapa Nui en el idioma aborigen), según la mitología pascuense. Hiva correspondería a la mítica Hawaiki de la mitología maorí, o su equivalente, y a las variantes existentes en las tradiciones de muchas culturas polinésicas.
Leyenda
La tradición pascuense señala que los antiguos maori ('sabios') habían pronosticado que vendría un tiempo en que Hiva se hundiría. Este hundimiento de la tierra se dice que habría sido predicho por Moe Hiva, uno de los cinco sabios y profetas (kohou tohu) que tenía la corte de Oto Uta, el primer ariki ('rey') -los otros cuatro sabios (ariki maahu) eran Tuku Maura, Ngerani, Po y Henga, quienes tenían conocimientos del cielo, las estrellas, el Sol y la Luna-.
El hundimiento de Hiva y el viaje de los antiguos rapanui buscando una nueva isla, siguiendo la ruta de las estrellas, permitieron recientemente a un grupo de investigadores proponer a la isla Rapa Iti como candidata a ser identificada como Hiva.
La inundación
Esta predicción se habría empezado a cumplir en tiempos de Roroi A Tiki Hati, el cuarto ariki, cuando su territorio en Hiva, llamado Marae Renga, así como su segunda residencia, Marae Tohia, comenzaron a ser inundados por el mar.
La evidencia arqueológica reciente permite proponer que, alrededor del año 1200, Hotu Matu'a y su gente salieron desde Rapa Iti con rumbo a Rapa Nui, donde originaron la cultura rapanui que hoy conocemos.
Las tradiciones orales señalan que Hiva se hundió; sin embargo, hay relatos de que hubo viajes posteriores entre Rapa Nui e Hiva, lo cual indicaría que el hundimiento de esta última habría sido parcial. Producto de ello se habría perdido un alto porcentaje de las tierras cultivables, lo cual habría obligado a emigrar a una parte de su población. Rapa Iti cumple con esta condición, puesto que el cono volcánico de la isla se derrumbó generando la bahía de Ahurei.